Cómo decir sí, pero no…

Punto de Vista/Por Filiberto Vargas Rodríguez.

Prefacio.

Así como para nadie fue un secreto la cercanía que tuvo con el entonces gobernador Javier Duarte de Ochoa, en el puerto de Veracruz y en Boca DEL Río todos saben que una de las voces más críticas contra Miguel Ángel Yunes Linares es la del periodista Marcos Miranda Cogco, “Marmiko”. *** Este miércoles el secretario de Seguridad Pública del Estado, Jaime Téllez Marie dio su versión sobre las razones por las que le retiraron al reportero la protección policiaca que se le había asignado a partir de que se conocieron diversas amenazas contra su persona. *** “Utilizaba a los policías como si fueran sus propios empleados (…) esa práctica la desterramos, es que con el pretexto de que lo amenazaron hace cinco años tenga a nuestros elementos como si fueran esclavos; nuestros elementos no son esclavos, son elementos de seguridad y que los traigan en los ‘súper’ cargando las bolsas del mandado de las señoras no lo vamos a permitir”. *** Téllez Marié informó que le retiró la custodia a cinco periodistas (al único que mencionó por su nombre fue a Marco Miranda) porque hacían mal uso de ese apoyo. *** La respuesta del periodista veracruzano, ex Rey del Carnaval, fue concreta. En su página de Facebook publicó: “Se avecina una campaña de desprestigio en mi contra, espero su apoyo. Eso demuestra que lo que digo les duele, espero que no lleguen a más y sea sólo eso, una campaña que no pase al secuestro o al asesinato. Espero su apoyo como siempre. El gobierno de Yunes me quiere callar e intimidar”. *** Mi solidaridad con todos ellos. Retirar la protección a periodistas amenazados, en un estado que ha destacado a nivel internacional por el alto riesgo que corren los comunicadores, en una administración que carga ya el asesinato de cuatro profesionales de la comunicación, es ratificar el desprecio que los actuales servidores públicos tienen para esta actividad. *** Ojalá la cruda realidad no los vuelva a abofetear.

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Los estrategas fueron muy claros:

– El tema con el que más te van a atacar es por el hecho de que tu padre es el gobernador y, por lo tanto, asumen que tu candidatura es una imposición. Esto lo tendrás que frenar desde tu primer discurso, desde tu primera conferencia de prensa. Les dirás, con firmeza, que tú tienes tu propia carrera política, que has hecho los méritos necesarios para merecer la candidatura y que tu padre y tú son dos personas distintas, con visiones diferentes.

Y apegándose al libreto, Miguel Ángel Yunes Márquez le respondió la pregunta de rigor a un reportero “sembrado”, que se daría por satisfecho con su rollo y evitaría así que otros comunicadores, con más “mala leche”, le rebatieran:

– El que quiera afirmar que yo puedo tener esta candidatura porque mi papá me la dio o influyó, es un tema realmente sin sentido, creo que yo tengo los suficientes elementos para poder buscarla, los suficientes resultados también y eso me hace un candidato competitivo a diferencia de otros candidatos que solo es hablar, hablar y que si uno revisa sus estadísticas como servidor público, la realidad es que no le han dado absolutamente nada a Veracruz.

Yunes Márquez aprovechó para responder a las dudas planteadas en este mismo espacio, sobre si sería capaz de criticar la gestión de su padre, o si optaría por defenderla y anunciar que le daría continuidad:

– A él le tocó la labor de estabilizar, a mí me tocará la labor de despegar para que finalmente Veracruz tenga un futuro brillante (…) Eso que ha hecho bien se tiene que continuar. Lo que falta por mejorar, se mejorará.

Hace ocho años, cuando Javier Duarte (considerado en ese entonces “hijo putativo” de Fidel Herrera) aspiraba a la gubernatura, se le cuestionó sobre sus objetivos, y fue más claro que el hijo de Yunes Linares. Sin dudarlo un segundo, Duarte respondió:

– El objetivo es lograr la continuidad de un proyecto que permita el desarrollo del estado y utilizar la política para el beneficio de la población en general y no de unos cuantos.

En su afán por descalificar los cuestionamientos sobre la imposición de su padre, Miguel Ángel Yunes Márquez afirmó que ya había pasado por lo mismo en otro momento y lo superó:

– La estrategia que estarán toda la campaña será la de decir que es una monarquía, que me puso mi papá. Es algo que ya viví. Lo viví cuando fui diputado en el 2004, exactamente decían lo mismo, y yo lo que decidí es brillar por luz propia y lo que habla por mí es mi trabajo.

Por supuesto, se equivoca o miente de forma deliberada el precandidato del Frente PAN-PRD. Nunca antes se planteó que su padre lo quisiera imponer como su sucesor en el más alto cargo político de la entidad, imponiendo la propia fuerza del Estado como aplanadora contra sus contrincantes.

Y también era muy válida, en ese entonces, la sentencia de que su carrera política avanzaba gracias a los acuerdos, a las componendas de su padre con la plana mayor del panismo nacional.

Hoy todos tienen muy claro quién coordinará la campaña de Miguel Ángel Yunes Márquez. Lo hará su padre, al que poco le falta para, incluso, irse a hacer campaña por él.

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Epílogo.

En El Universal no pasan por alto la amenaza del gobernador Miguel Ángel Yunes Linares, de que habrá de proceder penalmente en contra de ese medio de comunicación (¿Y el “respeto a los medios” que tanto presumía?). En la columna de los reporteros, Bajo Reserva, explicaron las razones de la postura tan agresiva del gobernador de Veracruz: “Yunes, el reloj de lujo y Anaya. La imagen de Miguel Ángel Yunes Linares escondiendo su reloj de lujo lo pinta de cuerpo completo: es un político que siempre ha escondido aquello que le estorba, como la larga alianza que tuvo con la maestra Elba Esther Gordillo, nos recuerdan. Pero también sabe poner el pecho para supuestamente mostrar sus lealtades, sobre todo ahora que busca imponer a su hijo Miguel Ángel como aspirante a gobernador de Veracruz. En esa ruta, nos dicen, busca congraciarse con Ricardo Anaya, con la idea del “complot” de El Universal para desprestigiar al ex dirigente del PAN y al mismísimo Yunes Linares. Nos explican que el actual gobernador veracruzano quiere mostrar que está aliado con el precandidato presidencial en una causa común contra un medio de comunicación, por haber dado una nota informativa, la del reloj que se compró por su cumpleaños que, por cierto, otros medios locales también manejaron. Así se las gasta…”. *** Y hablando de medios nacionales también le tocó su “raspón” al precandidato de Morena, en la columna Confidencial, de El Financiero: “Va Cuitláhuac, ya sin Duarte. El diputado federal morenista Cuitláhuac García parece seguir los pasos de su líder, López Obrador, en eso de no soltar candidaturas. Al menos así lo dispuso el que manda en Morena, quien eligió a Cuitláhuac para que busque de nueva cuenta la gubernatura de Veracruz. En 2016 alcanzó cifras de votación elevadas. Será interesante ver la votación que obtiene este año, sobre todo porque ya no estará Javier Duarte para echarle la mano, como dice el gobernador Yunes”. *** A propósito del mandatario estatal, éste sigue en su papel de profeta. Asume que lo que dice es Ley y que todos deben creerle. Así como juró que su reloj no cuesta seis millones de pesos, sino apenas la irrisoria suma de 200 mil pesos, ahora manda a callar a todos aquellos que lo critican de imponer un Poder Judicial a modo, con personajes allegados a él. “Yo no tengo ninguna intención de proponer a personas cercanas, tengo toda la intención de proponer a personas capaces para desempeñar el cargo”, dijo. El hecho de que su secretario particular cubriera ese perfil fue mera coincidencia. *** ¿Recuerdan quién hizo lo mismo con uno de sus secretarios? ¡Exacto! Javier Duarte impulsó como magistrado a su amigo, casi hermano, Amadeo Flores Villalba. *** Lo odia tanto, que cada vez se parece más a él.

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